Varios
El síndrome de la energía eólica
(28-02-2013) Traducción parcial del artículo The Logical Extension of Wind Turbine Syndrome escrito por el periodista escéptico Keith Kloor, publicado el 8 de febrero de 2013 en Discover Magazine. Aclaración: parece ser que en España no existen casos conocidos, el contenido de esta entrada es meramente informativa y no nos hacemos responsables de la propagación del síndrome. Si buscas “síndrome de los generadores eólicos” en inglés (Wind Turbine Syndrome), el primer enlace os llevará a un libro escrito por Nina Pierpont, autora de todo tipo de extravagantes titulaciones médicas, que revela “el sucio secreto de la energía eólica”: Mucha gente que vive a 2km de estos “gigantes giratorios” enferman. Tanto que casi siempre abandonan (tal cual, cierran la puerta y salen) sus hogares. Nadie quiere comprar sus casas acústicamente tóxicas. Los hay con suerte y las venden a desarrolladores de energía eólica, quienes rechazan firmemente reconocer que el Síndrome de los Generadores Eólicos existe (es más, los fabricantes de aerogeneradores incluyen una cláusula de confidencialidad en el contrato de venta, prohibiendo a sus víctimas hablar del tema).” ¿Es esto realmente cierto? El año pasado, el diario británico Daily Mail aseguró que miles de personas que viven cerca de aerogeneradores padecen de una variedad de males a causa del ruido de las hélices, desde zumbido en los oídos e insomnio hasta depresiones y tensión alta. El Daily Mail basó su informe en entrevistas y en un estudio de 2011. Nuevas noticias aparecen cada semana, quizás relacionados con un creciente movimiento “anti-eólico”. Investigadores han intentado tratar el tema: “se trata de la clásica enfermedad “comunicada”. Es decir, se propaga porque se habla de ella. Por consiguiente, es candidata a ser definida como una condición psicogénica.” En otras palabras, es un fenómeno semejante al de la histeria colectiva. Un brote de aparentes problemas en la salud con una base psicológica antes que física. Stephen Colbert bromeó sobre ello a finales de 2012: “Ahora, el Síndrome del Generador Eólico podría solo ser una colección de quejas sin relación sobre la salud. Varios estudios han concluido que no hay evidencia de efectos en la salud debido a los generadores eólicos. Pero que sea inventado no quiere decir que no sea contagioso. Se dice que es una enfermedad “comunicada” porque se extiende gracias al efecto Nocebo, porque se habla de ella.”. A principios de febrero, otros tres doctores publicaron un estudio en The Journal of Laryngology & Otology llamado “Síndrome del Generador Eólico: ¿Hecho o ficción?”. Por un lado, los autores admiten que “no hay suficiente información disponible que exponga la posibilidad de un síndrome causado por aerogeneradores. La mayoría de esta información está basada en puras anécdotas”. Sin embargo, destacan que “hay un incremento en evidencias que sugieren que el infrasonido y las bajas frecuencias causan efectos fisiológicos en el oído. Hasta que sean completamente comprendidas, es imposible exponer de forma definitiva que el ruido de los aerogeneradores cause alguno de los efectos descritos, porque requiere mayor investigación.”. Cuanto más se observa el aparente fenómeno, la posibilidad de que el infrasonido pueda causar efectos perjudiciales parece ser cada vez más real. Pero hasta el momento, se debe tener en cuenta dos puntos: el primero, es que el infrasonido puede causar estrés en personas y síntomas de mareo, zumbidos en el oído y pérdida de audición; y segundo, los aerogeneradores producen este infrasonido, pero no nos podemos plantar de manera inequívoca que produzcan todos los síntomas que las personas afectadas reclaman. Lo que es más interesante es lo que afirma la página del mismo creador del síndrome y autor del libro anteriormente mencionado: “desde que se publicó el libro en 2009, Pierpont, ha comprobado de distintas personas alrededor del mundo que el síndrome no está confinado a existir únicamente en el mundo de los generadores eólicos. Resulta que se han encontrado personas con los mismos síntomas que viven cerca de estaciones de gas natural, de estaciones de tratamiento de aguas residuales, fábricas de aire acondicionado, y otras plantas de energía. En todos los casos, el sonido de baja frecuencia provocado parece ser la culpable. Básicamente, Síndrome del Generador Eólico, pero sin el generador eólico”. Todos forman parte del juego. ¡No hay favoritos! |
Pobladores se quejan del zumbido que produce el parque eólico
(20-02-2014) La empresa Desarrollos Eólicos Mexicanos (Demex) ha ocasionado “un problema muy grande” en Unión Hidalgo, Oaxaca, ya que hay personas que a 500 metros de los aerogeneradores del parque eólico Piedra Larga se quejan del zumbido que producen (de 91.5 decibeles de acuerdo a un estudio independiente realizado en el lugar) informó el presidente municipal de dicho poblado, José López de la Cruz. El munícipe, quien denunció que ahora la empresa -filial de la española Renovalia Energy- pretende construir aerogeneradores a 300 metros del pueblo, advirtió que si directivos de Demex no acuden este viernes a una reunión a la que se les convocó “el pueblo se va a levantar y bloquear su obra”; los eólicos deben estar “a no menos de dos kilómetros de las casas”, afirmó. En entrevista telefónica manifestó que los representantes de Demex alegan que hicieron u contrato con los campesinos para ocupar sus parcelas con los aerogeneradores y presentan un estudio de Semarnat, “pero nunca lo presentaron con el pueblo, vienen y dicen que van a dar un dinero para el desarrollo de la comunidad pero el problema es la cercanía de los aerogeneradores” a la zona habitacional y el impacto ambiental y humano. Enfatizo que el zumbido de los eólicos molesta más por las noches. Mencionó que aunque Demex haya hecho contrato con los campesinos, debe respetar la distancia mínima para evitar dañar la salud de la población. Además “Demex ha estado explotando los recursos naturales de Unión Hidalgo y no ha hecho ninguna aportacón para la comunidad, debe dejar obras de beneficio para el pueblo, le vamos a exigir un hospital y una universidad”, añadió. El estudio sobre el ruido que produce la primera etapa, ya funcionando, del parque eólico Piedra Larga lo realizó, el pasado 22 de diciembre, el ingeniero Jesús Aquino. De acuerdo al reporte entregado al presidente municipal de Unión Hidalgo, a 50 metros del aerogenerador el nivel de ruido, medido en decibeles (dB) el de 96.2; a 100 metros, de 95.7; a 200 de 94.2; a 300, de 93.7 y a 500 metros de distancia de 91.5 dB. Aquino menciona que el límite superior de ruido deseable es de 50 dB, según la Organización Mundial de la Salud. La citada medición, detalla, se realizó en base a la norma ANSI SI.4, con un sonómetro tipo II de la marca Quest, con sus micrófonos correspondientes, con un margen de error de 0.2 dB. “Con estos datos se comprueba que el nivel de ruido existente en dicho parque, es muy alto, de acuerdo a las normas de salud a nivel auditivo”. Indica que cuando la velocidad del viento alcanza 11 km por hora, el ruido generado por un solo aerogenerador es de 99.7 dB, a 50m de distancia de donde se encuentra ubicado dicho equipo. En horario de 00:30 hrs. a 04:45 hrs., cuando el viento sopla tan solo 6 metros por segundo, el ruido de los aerogeneradores se siente más en la población. Aquino coincidió con López de la Cruz en que existen ya familias al norte de Unión Hidalgo que, ya sienten trastornos en el sueño. Indicó que el fenómeno llamado Síndrome de la turbina eólica puede provocar a la larga, enfermedades auditivas, como mareos, Tinnitus (zumbido en los oídos), estrés, efectos psicofisiológicos, incluso problemas cardiacos. En su reporte, copia del cual envió al gobernador de Oaxaca, Gabino Cué y a la Comisón de Salud de la Cámara de Diputados, mencionó que la primera fase de 90 Megawatts (Mw) de Piedra Larga ya está en operación y el grupo Bimbo, es el que aprovecha la energía eléctrica, además, que está próxima la operación de la segunda fase, con un total de 228 Mw y en lo futuro viene la tercera y cuarta fases. Enfatizó su preocupación por la proximidad de seis bases de aerogeneradores a 300 metros de la población, del lado norte; al nororiente habrá aerogeneradores a 400 metros y al oriente, otros a 700 metros, subrayando que Demex “nunca presentó un mapa acústico del anteproyecto”. De acuerdo a las Guías para el ruido urbano de la OMS, “para descansar apropiadamente, el nivel de sonido equivalente no debe exceder 30 dB para el ruido continuo de fondo y se debe evitar el ruido individual por encima de 45 dB”. |
Investigación sobre Vínculo entre Estrés de Ballenas y Contaminación Acústica Reafirma Necesidad de Relocalizar Parque Eólico Chiloé
(28-02-2012) Una investigación casualmente realizada tras el atentado a las torres gemelas en 2001 en Estados Unidos, se ha convertido en la primera evidencia científica que demuestra la relación directa entre la contaminación acústica marina y el nivel de estrés en ballenas. Los resultados refirman el llamado de la comunidad científica internacional a relocalizar el Parque Eólico Chiloé que busca emplazarse en un hábitat crítico para ballena azul y cuyo nivel de ruido constituye una amenaza para esta especie En Peligro. Boston, Estados Unidos, 28 de Febrero de 2012 – Tras el atentado a las torres gemelas en Nueva York (Estados Unidos) en septiembre de 2001, el tráfico aéreo y marítimo se redujo al mínimo debido a que durante los días posteriores limitaron por razones de seguridad ambos tipos de transporte en todo el territorio norteamericano. Esta situación se convirtió accidentalmente en la oportunidad para que un grupo de investigadores de ese país confirmaran científicamente el vínculo entre el nivel de estrés de ballenas y la contaminación acústica marina. El 11 de septiembre de 2001 la investigadora Rosalind Rolland, del acuario de Nueva Inglaterra, se encontraba en la bahía de Fundy tomando muestras de heces de ballenas como parte de un estudio sobre salud y reproducción de las ballenas franca del norte (Eubalaena glacialis), una especie que se encuentra en peligro de extinción debido a que quedarían menos de 300 individuos. Tras la noticia del atentado en Nueva York, el quipo de científicos decidió seguir adelante con sus labores a pesar de la consternación del momento. De manera simultánea, la investigadora acústica, Susan Parks, se encontraba realizando grabaciones de sonido de las madres y crías de ballena franca de norte con el fin de conocer más acerca del comportamiento de esta especie. Sin embargo no fue hasta 2009 que los datos de ambas investigadoras convergieron durante un taller organizado por la Agencia de Investigación Naval. Rolland, quien había iniciado un estudio sobre contaminación acústica y niveles de estrés en las ballenas, supo que Parks contaba con grabaciones de sonido en la bahía de Fundy registradas dos días antes y dos días después del 11 de septiembre de 2001. Por su parte, Rolland tenía importante información, reunida antes y después de esta fecha, sobre una hormona que se encuentra en las heces de las ballenas y que permite determinar los niveles de estrés en las ballena. Tras una serie de análisis preliminares, el estudio obtuvo el financiamiento necesario para hacer pruebas más rigurosas las que finalmente demostraron la relación entre el ruido marino y los niveles de estrés en las ballenas. Los resultados se obtuvieron tras comparar los niveles esta hormona antes y después del 11 de septiembre de 2001, cuando el ruido marino se redujo considerablemente durante varios días. El estudio evidencia que las ballenas y otras especies marinas que utilizan el sonido para comunicarse, migrar y encontrar alimento, entre otros, se ven afectadas por la contaminación acústica producida por las actividades humanas, como tráfico marítimo, sonares militares de alta intensidad y baja frecuencia, prospecciones de petróleo y gas, parques eólicos costeros y marinos, etc., por lo que Rolland considera que es importante continuar las investigaciones sobre este tema con el fin de avanzar hacia la adopción de medidas que mitiguen los impactos negativos del ruido marino producido por el ser humano. Los resultados del estudio fueron publicados recientemente en Proceedings of the Royal Society. Parque Eólico Chiloé, Amenaza Acústica para las Ballenas Azules de Chile El resultado de esta investigación fortalece el llamado realizado por la comunidad científica internacional al presidente de Chile, Sebastián Piñera, sobre la necesidad de relocalizar el mega proyecto Parque Eólico Chiloé, que busca instalar decenas de torres eólicas de más de 90 metros de altura en la sensible playa de Mar Brava (noroeste de Isla Grande de Chiloé), cuyas aguas constituyen una de las principales áreas de alimentación de ballena azul en todo el hemisferio sur. El pasado 14 de dicembre, Bárbara Galletti, presidenta del Centro de Conservación Cetacea y miembro del Comité Científico de la Comisión Ballenera Internacional, entregó en el palacio de La Moneda una carta firmada por más de 50 científicos internacionales, entre los que se encuentran los principales investigadores de acústica y ballenas del mundo, que solicita al presidente Piñera relocalizar el proyecto con el fin evitar impactos negativos a la población de ballena azul presente en aguas chilenas y cumplir con la legislación nacional, exigiendo la realización de un Estudio de Impacto Ambiental (leer carta). En dicha oportunidad, el asesor presidencial, Felipe Alessandri, se comprometió a entregar pronta una respuesta al llamado de la comunidad científica internacional. Sin embargo La Moneda no ha vuelto a pronunciarse sobre el tema. Al respecto, cabe destacar las declaraciones del Dr. Cris Clark, uno de los cincuenta científicos adherentes de la carta enviada a Piñera y director del programa de investigación de bioacústica del laboratorio de la Universidad de Cornell de EE.UU en relación a la reciente publicación de Rolland, quien afirmó que “esta es la primera pieza de evidencia científica sólida sobre el nivel de ruido marino y el estrés en ballenas” lo cual resulta preocupante toda vez que los niveles de estrés en las ballenas han estado ligados por largo tiempo ligado desplazamiento de hábitat críticos, menor longevidad, aumento de la tasa de mortalidad, así como diversos indicadofres de la salud de estos mamíferos marinos. Bajo la legislación chilena todas las especies de cetáceos se encuentran protegidas por la Ley de Protección a los Cetáceos y un decreto que los declara Monumento Natural. Ambas medidas fueron adoptadas tras la campaña “Chile 2008, Santuario de Ballenas” realizada por el Centro de Conservación Cetacea, Centro Ecoceanos y la Confederación Nacional de Pescadores Artesanales (CONAPACH). Bajo este marco legal, cualquier proyecto que pueda afectar a las especies de cetáceos debe someterse a un Estudio de Impacto Ambiental. Sin embargo, en 01 de Agosto de 2011, la Comisión de Evaluación Ambiental de la región de Los Lagos, presidida por el intendente de la Región de los Lagos, Juan Sebastián Montes, aprobó el mega proyecto Parque Eólico Chiloé sin cumplir con la normativa vigente, por lo que se espera que el gobierno rectifique esta transgresión a la institucionalidad ambiental y exija a la empresa a cargo del proyecto (Ecopower) la realización del Estudio de Impacto Ambiental. Para Bárbara Galletti “el estudio de Rolland confirma la urgente necesidad que el gobierno del presidente Piñera actúe con responsabilidad antes de permitir la construcción de un proyecto que puede afectar a las ballenas azules, la especie más grande que jamás ha existido en el planeta y de la cual sólo queda menos de un uno por ciento de las que habitaban el océano antes de la ballenería industrial. Reiteramos el llamado realizado por la comunidad científica internacional en diciembre pasado y esperamos una pronta respuesta de parte del gobierno”. Fuente: Science Daily, Centro de Conservación Cetacea |
El New York Times y Ecopower
El New York Times ha realizado recientemente (6 de enero de 2012) un reportaje sobre 45 sitios en el mundo a los que ir en 2012 y entre ellos se encuentra Chiloé de donde destaca las iglesias, declaradas Patrimonio Universal por la Unesco, su fauna y su belleza natural. Pero, dice el artículo, la empresa Ecopower se dispone a construir un parque eólico con 56 aerogeneradores por lo que la isla de Chiloé podría perder muchas de sus aves migratorias y además se verían amenazados los pingüinos y las ballenas azules. "En otras palabras, el momento para ir es ahora" termina el artículo. El The Clinic on line también se hace eco de la noticia, bajo el titular "New York Times recomienda ir a Chiloé antes de que Piñera lo haga mierda" hace una reseña del mismo artículo. |
¿Cuánto ruido hace un aerogenerador?
Mucho se a hablado sobre los ruidos de los aerogeneradores, y de que no hay evidencias de que estos afecten a la salud, es interesante conocer a cuanto equivalen realmente, para lo que General Electric (GE) ha creado esta infografia que lo explica. Como podemos ver, y si alguno a tenido la posibilidad de haber estado cerca de un aerogenerador sentiste el ruido que estos generan, cerca del aerogenerador es donde más elevado es el nivel de dB(A), llegando a parecerse a una aspiradora, e incluso mayor. Pero si nos alejamos lo suficiente, a 400 metros estamos hablando de que el ruido que llega del aerogenerador es comparable con un refrigerador… prácticamente despreciable. Entonces si tomamos en cuenta el ruido de fondo en cualquier sitio normal está en torno a valores de esa magnitud (unos 40dB) y si estás en una ciudad da gracias. Así que es un valor normal. De todas formas hay que tener en cuenta que no hay un sólo generador si no que hay varias decenas por lo general y que ese valor de 40dB hay que sumarselo al número de generadores que hay. Por lo que seguramente pueda llegar a subir 6dB sin problemas. Aun así, es un valor bajo y dentro de los límites legales. Publicado el 26-12-2011 en descontamina.cl |